12 Acciones Para Dejar de Procrastinar

Esto resulta aún más difícil debido a que estamos fácilmente expuestos a distracciones, me atrevo a decir que algunos de nosotros nos hemos hecho adictos a estas distracciones. 

Bueno aquí  te dejo una lista de pasos que puedes implementar en tu vida para dejar de procrastinar y mejorar tu productividad. 

Crea hábitos que soporten tu trabajo

Los hábitos son acciones arraigadas a nosotros, intenta enfocarte en crear hábitos que te ayuden a mantenerte en un buen estado, listo para trabajar y enfocarte. 

Planea tu trabajo

Si no sabes qué es lo que tienes que hacer, simplemente tendrás una mala experiencia, cuando tus objetivos no son claros, estás posicionando en un mal lugar que te hará sentir mucha ansiedad. 

Eso no es bueno, la ansiedad afecta la forma en la que nos comportamos.

Si deseas reducir tu ansiedad para ser más productivo, crea un buen plan.

Elimina distracciones

Es algo bastante lógico, sin embargo no todos lo hacen. 

Imagínate esto, estás por comenzar tu trabajo más importante y tienes tu celular a la vista, te has mentalizado para tomar acción en esa actividad difícil e importante, das el primer paso y comienzas a teclear aquel ensayo… y de repente justo cuando comienzas se escucha un pequeño zumbido. 

Ese zumbido que todos conocemos, el zumbido de la perdición y la procrastinación, (me refiero a los mensajes o notificaciones de un celular)  

Ese zumbido representa tiempo perdido y distracciones, si estás trabajando y dejas tu celular a la vista, te estás posicionando en un mal lugar para lograr tu trabajo. 

Se honesto contigo 

La honestidad es bastante importante, todos nos engañamos o nos convencemos de hacer cosas que no son tan buenas de vez en cuando. 

La verdad es que tenemos el hábito de procrastinar y debemos de reconocerlo, el primer paso para reconocer algo malo en nuestro comportamiento es siendo honestos con nosotros mismos.

Trabaja en algo que te guste

A Veces decidimos trabajar en algo que no nos apasiona totalmente, hay ocasiones en las cuales no tenemos otra opción más que hacer eso que no nos guste, pero si tienes la libertad o la oportunidad de escoger trabajar en algo que te guste, ¡hazlo!

Crea un buen ambiente de trabajo

Un buen ambiente de trabajo te ayudará a reducir esa resistencia que sientes al momento de enfrentarte a aquella actividad difícil. 

Facilita el acceso a tu trabajo 

Acomoda todos los archivos, programas o softwares de forma en la cual sea sencillo acceder. Así tu experiencia de trabajo será más agradable 

Establece objetivos realistas

A Veces tendemos a ser muy exigentes con nuestros propios objetivos, esto nos puede llevar a lugares de frustración y ansiedad. 

Observa tu comportamiento

Presta atención en tus acciones, intenta preguntarte qué es lo que te llevó a tomar cierta decisión. 

Si prestas atención y observas tus acciones, te darás cuenta de que es lo que estás evitando o postergando.  

Convéncete de que procrastinar no es bueno

A Veces podemos decir: “trabajo mejor cuando estoy bajo presión” esto es una creencia que puede justificar nuestras acciones, pero la realidad es que sabemos que la procrastinación no es algo bueno y tiene muchas consecuencias negativas. 

Acepta que algún trabajo no será divertido

Cuando negamos algo, estamos luchando contra ello, si siempre estás luchando con la idea de que el trabajo no es agradable, terminarás agotado. 

Cuando aceptas que debes de realizar algo que no es divertido, dejas de luchar y guardas más energía para poder dirigirte hacia ese trabajo difícil.

Crea una nueva identidad

Enfócate en convertirte en la persona que hace el trabajo. Cada acción que tomas es una reflección de tu identidad recuérdalo.